Últimamente hay muchas personas que me piden consejos para hacer ayunos y, creo que a veces se puede confundir el término ayuno terapéutico con hacer un tipo de alimentación durante unos días concretos, con el fin de detoxificar el cuerpo y nuestros órganos como hígado y riñones.
Así que antes de decidir qué hacer, sería conveniente entender que es una cosa u otra.
Existe el ayuno terapéutico, este tipo de ayuno se debería hacer bajo supervisión médica, ya que la cantidad de calorías que se consumen diariamente puede ser entre 200 kcal y 400 kcal. Este tipo de ayuno debería estar destinado a personas con obesidad que necesitan perder peso de una manera rápida. En este tipo de personas cuando se empieza el ayuno pierden sus reservas de glucosa, posteriormente se pierden el glucógeno hepático y, al tratarse de una persona con un elevado porcentaje de grasa, tras este consumo puro de los azúcares de reserva empieza su cuerpo a obtener energía de otros tejidos con su consecuente degradación de su propia grasa. Esto puede ocurrir aproximadamente tras 3 días de ayuno.
¿Qué pasa si soy una persona delgada? Entonces la situación cambia, en estos casos existe una importante pérdida de masa proteica, estas personas al tener poco tejido graso su cuerpo para obtener la energía necesaria para su funcionamiento, la obtendrá degradando su masa muscular.
Existen ayunos donde se permiten zumos de vegetales y fruta, pero también con una baja aportación clórica, éstos también deberían de ser supervisados por profesionales de la salud, con esta ingesta calórica no se puede realizar una vida normal, es por ello que muchos lo recomiendan conjuntamente con un “retiro” donde se realizan actividades como meditación y yoga.
Por otro lado existen los planes detox. Estos planes consisten en limpiar al organismo a través de la alimentación de las toxinas acumuladas que entran a través del aire que respiramos, del agua (aunque sea mineral y embotellada no hay garantías que no haya alguna sustancia nociva), de los alimentos y, también de las toxinas que nuestro cuerpo genera como los radicales libres por el estrés.
Cuando nuestro cuerpo acumula toxinas esto nos afecta a nuestra salud, podemos sentir cansancio, todo nos cuesta más, nuestros sistema inmunológico de debilita y si tenemos alguna patología dolorosa el dolor incrementará.
Una manera de realizar un plan detox es tomar zumos (entre 5 y 6 al día). ¿Sirven todos los zumos? Pues no, estos deberían realizarse de manera individualizada en función de las necesidades de la persona, no es lo mismo una persona propensa a tener algún tipo de hipoglucemia que las que tienen la glucosa elevada en sangre, las que hacen deporte, las sedentarias, etc… pero siempre estoy hablando de personas que no padezcan ningún tipo de patología grave, en este caso deberían hacerse bajo supervisión médica.
También hemos de ser conscientes que estamos hablando de eliminar toxinas corporales, no de pérdida de peso. Muchas personas quieren hacer ayunos o planes detox para adelgazar y este es un concepto erróneo, si se quiere tener un peso saludable hay que tener un estilo de vida donde los vegetales y frutas abunden y hacer ejercicio, no hay productos mágicos ni consejos milagrosos.
Se puede realizar este plan durante 3 días seguidos, o se puede realizar 1 día o 2 a la semana puntuales. Si se realiza 1 día a la semana permite seguir con la rutina diaria, hay personas que pueden hacerlo 2 días seguidos porque se sienten genial y con más energía, y hay quien prefiere hacerlos alternados.
Pero quiero remarcar que no todos los zumos o batidos son adecuados, la remolacha por ejemplo es muy buena pero muy rica en carbohidratos, el apio es un potente diurético, hipotensor y vasodilatador (por lo tanto baja la tensión), el pomelo actúa directamente en la detoxificación hepática (interactúa con algunos fármacos), los frutos rojos son potentes antioxidantes, las zanahorias nos aportan vitaminas y betacarotenos que nos protegen y reparan nuestras mucosas, las algas nos remineralizan y algunas tienen un gran poder detoxificador de metales pesados…
Los planes detox se deberían realizar personalizados a los objetivos y el metabolismo de la persona.
Espero que haya quedado claro que tanto un ayuno como un plan detox, no debería enfocarse como un método de adelgazamiento sino como algo mucho más importante para nuestro organismo como limpiarlo de todas las toxinas generadas, tanto endógenas como exógenas. En función de lo que uno quiera puede optar por un ayuno controlado en un retiro con la experiencia asociada de yoga, meditación, paseos, o bien, por un plan detox que puede ser inclusive de solamente 1 día a la semana, durante el cual todos los órganos descansan y se eliminan toxinas.
Susagna Muns
Graduada en Naturopatia – Kinesióloga