UN RESPETO PARA LOS NATURÓPATAS

Últimamente he vivido dos situaciones muy desagradables, que me han hecho replantear hacer un artículo para que aquellas personas que lo lean sepan exactamente lo que la figura de un naturópata representa.

La primera situación fue con un estudiante de biología (de unos 40 años) dependiente en una tienda de productos ecológicos, el cual tras una conversación en la que manifiesto mi disconformidad en tanto que a los naturópatas nos vetan el poder acceder a másteres de nutrición, me responde que es normal. Su argumento es que al no tener una carrera universitaria reconocida se ve que no tenemos los conocimientos suficientes como para entender el contenido del mismo.

La segunda situación fue la semana pasada, cuando unos médicos convencionales llegaron a la conclusión que los naturópatas no tenemos ni idea de hacer una dieta ni de tratar patologías. Me lo dijeron sin ningún tapujo ni pudor, ni paños calientes.

Hice un salto en el tiempo cuando las mujeres no podían tener una cuenta bancaria sin permiso del marido o del padre, y el acceso universitario era coto de pocos.

La sensación que tenemos algunos naturópatas, es que somos (disculpen la expresión) las prostitutas baratas de las carreteras que se ganan la vida como pueden. Profesión dura donde las haya y que en cierto modo están cumpliendo un servicio social y a veces incluso psicológico. Todo el mundo sabe que existen, que están ahí, pero no tienen un reconocimiento legal.

Así nos encontramos nosotros, existimos, luchamos, estamos ahí, pero claro, en este país no son estudios universitarios reglados (en otros países si que lo son), ni tenemos una licenciatura en medicina. Pero pagamos seguros, autónomos, impuestos e IVA el 21%.

Así que para aquellos “que opinan despectivamente de mi sector” voy a detallar en qué consisten los estudios rigurosos en una academia autorizada para obtener un certificado de Graduado en Naturopatía:

1er año:

• Anatomía de Aparato Locomotor 80 horas.
• Bioquímica e Introducción de la Dietética 30 horas.
• Situaciones de Urgencia en Consulta y Primeros Auxilios 20 horas.
• Educación para la salud/ ética/ deontología y Legislación 10 horas.
• Anatomía, Fisiología, Patología y Semiología I 130 horas.
• Principios y Fundamentos de la Naturopatía 60 horas.
• Iridiologia 40 horas.

2º año:

• Anatomía, Fisiología, Patología y Semiología II 70 horas.
• Entrevista clínica, Exploración Física y Casos prácticos 40 horas.
• Conocimiento Psicoemocional del Paciente 30 horas.
• Introducción a la Farmacología 30 horas.
• Atención y Gestión Sanitaria 10 horas.
• Nutrición y Dietética 80 horas.
• Fitoterapia, principios activos y plantas medicinales 110 horas.
• Estímulos Naturales 10 horas (es una asignatura práctica).

3er año

• Introducción a las Flores de Bach 30 horas. (Yo hice un curso específico de Flores de Bach 120 horas).
• Homeostasis y valoración 30 horas.
• Dietoterapia 50 horas.
• Complementación e Integración terapéutica 110 horas.
• Dietética aplicada a la Naturopatía e Introducción a Otras terapias 60 horas.
• Farmacología y Medicina Integrativa 120 horas.

Con esto se obtiene el certificado de Naturopatía siempre y cuando se haya entregado y aprobado una tesina de final de estudios. En mi caso mi tesina se ha convertido en un libro de 400 páginas. “Cáncer. El porqué de la medicina complementaria”.

Para obtener el certificado de “Graduado de Naturopatía” se han de realizar prácticas clínicas en un centro de medicina integrativa.

600 horas prácticas en el centro, donde no solamente se evalúan la aptitud, actitud, puntualidad, empatía, relación con los compañeros y la entrega por escrito de 6 casos prácticos. Sino también el trato, atención y tratamiento recomendado (porque no podemos recetar sino recomendar) a los pacientes. Aunque suene “prepotente” en éste último apartado saqué un 10 sobre 10. En naturopatía no existe matrícula de honor.

Y por si fuera poco, los profesionales que nos dedicamos a esto, lo hacemos por vocación, porque creemos que los pacientes no son números en una sala de espera. Son personas que además de tener unos síntomas, también tienen emociones, un entorno social, familiar y económico que les rodean, ahí estamos nosotros tratándolos como un todo de una manera holística.

Así que aunque no sean estudios universitarios reconocidos, creo que son suficientemente válidos como para poder acceder a cualquier tipo de máster relacionado con la nutrición.

En cuanto a si sabemos o no tratar patologías, un buen naturópata no tiene  protocolos, porque cada paciente es un mundo, no tratamos enfermedades sino personas que han desarrollado una patología, los tratamientos son personalizados, y puedo demostrar que son efectivos.

Los que me conocen, saben perfectamente que defiendo la medicina integrativa, nunca me he considerado medicina alternativa, así que si yo y muchos de mi sector  respetamos la medicina convencional, pido fervientemente un respeto para los “Profesionales de la Naturopatía”.

Susagna Muns
Naturópata – Homeópata